Pollo entomatado
Reconozco que de niña y hasta hace algunos años, si me daban a elegir entre pollo o verduras, sin dudarlo prefería las verduras. No me gustaba nada, aunque si por consideración en casa ajena o en algún evento el pollo estaba en el menú, no tenía problema en comerme una parte del platillo. Hoy en día, aunque no está entre mis alimentos favoritos, asumo sin remilgos que le he encontrado el gusto y sobre todo, en lo que toca a cocinar.
Es sano, es muy versátil y fácil de preparar, su carne se adapta a prácticamente todos los sazones y formas de cocimiento. Las alas son adecuadas como un snack con salsas bien condimentadas, los muslos se prestan para casi cualquier salsa, para el horno, la parrilla, la cacerola o las brasas, queda buenísimo con un buen sazón. Y las pechugas para el régimen, el asado o rellenarlas de queso, verduras o incluso marisco, van de maravilla.
En esta ocasión, se trata de un estofado al horno casero y tradicional, el sutil sabor del pollo se combina fabulosamente con el gusto dulce y ácido del tomate mezclado con el amargo de la cerveza y las aceitunas.
Si queréis compartir cómo lo habéis preparado, si tenéis alguna cerveza favorita o si preferís una pieza del pollo sobre las demás, comentadlo para poder retroalimentarnos y mejorar esta receta que se encuentra entre las más recurridas de las amas de casa y cocineros de Veracruz.
Los ingredientes:
Poner el horno a 180ºC antes de preparar el pollo para que no se precaliente demasiado tiempo.
Se unta la mantequilla en una charola de metal y se colocan las piezas de pollo salpimentadas sin encimarlas. Magullar y despedazar bien el tomate con la mano y bañar el pollo por encima, añadir la almendra, las aceitunas y regar la cerveza cubriendo todas las partes de pollo. Cortar las papas en trozos gruesos y medianos, introducir al horno por hora y media, cuidando que no se seque y bañarlo una o dos veces con el caldo resultante. Servir caliente acompañado por arroz blanco.
Espero os guste y lo disfrutéis mucho.
Es sano, es muy versátil y fácil de preparar, su carne se adapta a prácticamente todos los sazones y formas de cocimiento. Las alas son adecuadas como un snack con salsas bien condimentadas, los muslos se prestan para casi cualquier salsa, para el horno, la parrilla, la cacerola o las brasas, queda buenísimo con un buen sazón. Y las pechugas para el régimen, el asado o rellenarlas de queso, verduras o incluso marisco, van de maravilla.
En esta ocasión, se trata de un estofado al horno casero y tradicional, el sutil sabor del pollo se combina fabulosamente con el gusto dulce y ácido del tomate mezclado con el amargo de la cerveza y las aceitunas.
Si queréis compartir cómo lo habéis preparado, si tenéis alguna cerveza favorita o si preferís una pieza del pollo sobre las demás, comentadlo para poder retroalimentarnos y mejorar esta receta que se encuentra entre las más recurridas de las amas de casa y cocineros de Veracruz.
Los ingredientes:
- 6 raciones de pollo (podéis usar la pieza que más o guste)
- 1/2 kg de tomate, asado y pelado
- 1/4 kg de almendras peladas y cortadas en rajitas
- 1 frasco de aceitunas enteras sin hueso
- 1 lata de cerveza oscura o clara según preferencia.
- 1 kg de papas crudas peladas
- Sal y pimienta al gusto
- Mantequilla al gusto
Poner el horno a 180ºC antes de preparar el pollo para que no se precaliente demasiado tiempo.
Se unta la mantequilla en una charola de metal y se colocan las piezas de pollo salpimentadas sin encimarlas. Magullar y despedazar bien el tomate con la mano y bañar el pollo por encima, añadir la almendra, las aceitunas y regar la cerveza cubriendo todas las partes de pollo. Cortar las papas en trozos gruesos y medianos, introducir al horno por hora y media, cuidando que no se seque y bañarlo una o dos veces con el caldo resultante. Servir caliente acompañado por arroz blanco.
Espero os guste y lo disfrutéis mucho.
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